"Cuerpo Vital, Sueño y Salud"
-El origen de nuestra Calidad de Vida-
Llegados a éste punto, conocemos que no puede hacerse nada para prolongar la Vida, salvo que sea decidido por nuestro Espíritu, Christos, Dios. Solo Dios posee el secreto de la Piedra Filosofal y del elisir de la larga vida.
Como hemos dicho, sin embargo, sí está en nuestras manos el mejorar, enormemente, la calidad de la Vida que, como Personalidad, se nos ha concedido. Según vivamos, según nos alimentemos y según tratemos nuestra psíque y a nuestros semejantes así será de satisfactoria nuestra Vida.
Hablamos, en capítulos anteriores, de la necesidad de una actividad física adecuada, dado que nuestros cuerpos son máquinas biológicas que están diseñada para funcionar durante un tiempo determinado con sus correspondientes descansos. Este hecho, es parte de lo que nuestros biólogos conocen como metabolismo. No todos los metabolismos son iguales, unos son más lentos como los de los koalas, Perezosos o Pandas, otros son mucho más rápidos como los de los roedores, mustelidos y aves de presa. En el medio de ese panorama nos encontraríamos los seres humanos y, sin embargo, entre los propios seres humanos existen diferentes tipos de metabolismos.
El Cuerpo Vital es una parte importante del Campo Aural de los seres humanos y es el que lleva sobre sí, la mayor responsabilidad de mantener nuestro natural metabolismo equilibrado y así tener una calidad de vida adecuada libre de enfermedades de carácter metabólico.
El binomio Actividad Física-Descanso es fundamental para un correcto funcionamiento de nuestro metabolismo biológico; pero no sería posible sin la actividad permanente de nuestro Cuerpo Vital.
El Cuerpo Vital, como su nombre indica, es la parte etérea de nuestro Cuerpo que se encarga de que todos nuestro Organismo funcione sincronizado y siguiendo las pautas programadas en nuestra genética.
El Cuerpo Vital no descansa nunca y nos acompaña desde el Nacimiento a la Tumba; pero durante los periodos de actividad y donde nuestros cuerpos sufren mucho estrés y pierde muchas calorías, éste trabaja demasiado y en muchas ocasiones no puede cumplir su labor a la perfección, y es por ello que se requieren los necesarios periodos de descanso, relajación y sueño profundo.
Durante estos períodos mencionados, especialmente el del trance del sueño, el Cuerpo Vital, que no para de actuar, su trabajo se realiza con muchísima mayor eficacia, dado que la actividad física y mental se encuentran en stanbye, en una suerte de estado letárgico que impide que se produzcan interferencia con el natural proceso reparador celular que le corresponde al Cuerpo Vital de nuestro completo Campo Aural.
Veremos más adelante la importancia que poseen los otros cuerpos o campos auricos en nuestra vitalidad corporal como el Cuerpo etérico, en nuestra estabilidad emocional mediante el Cuerpo de Deseos o en el equilibrio de nuestra actividad psíquica mediante el Cuerpo Mental. Los Cuerpos, Espíritu del Hombre, Espíritu Virginal y Espíritu de Dios, también se ocupan de aspectos superiores a los de la mera psíque de la Naturaleza Humana.
El Cuerpo Vital, junto con el Cuerpo etérico, que se ocupa del perfecto equilibrio mineral e hídrico de nuestro cuerpo, están programados para mantener vuestro Cuerpo Material en un equilibrio lo más preciso posible e intentar remediar los posibles desequilibrios que se produzcan por una forma de vivir no demasiado convencional.
Veamos:
Fumar no es natural y perjudica a nuestro Cuerpo Físico, nuestros cuerpos Etérico y Vital, intentan contrarrestar los efectos nocivos hasta cierto límite o punto de no retorno. Ese trabajo restaurador se sigue produciendo, más eficazmente, mientras dormimos o meditamos.
Con otras sustancias tóxicas pasa otro tan de lo mismo, ya sean alcoholes, estupefacientes o alimentos no muy adecuados.
No obstante, el Cuerpo Vital, a modo de filtro de las materias tóxicas, de existir una reincidencia prolongada en el Tiempo termina saturándose hasta el punto de no poder continuar su acción reparadora.
Llegados a este punto, la única solución es modificar radicalmente nuestro modo de vida con el fin de que las toxinas acumuladas en nuestro cuerpo vayan siendo eliminadas mediante el drenaje linfático, urinario y fecal. Esto hará que, de forma paulatina, el Filtro del Cuerpo Vital se vaya purificando, igualmente, y recobrando todo su poder de reparación vital.
El Cuerpo Vital, por decirlo así, es el Centro de Control, desde donde se dirigen todos los sistemas reparadores y defensivos del Cuerpo Físico. Si nuestro Cuerpo Vital está fuerte, nuestros sistemas corporales estarán sanos; pero si el Cuerpo Vital lo bloqueamos con vicios y malos hábitos, las defensas de nuestro Organismo no serán operativas y funcionarán como un Cuartel sin gobierno alguno.
Un Cuerpo Vital sano y cuidado nos proporcionará una excelente calidad de vida libre de dolores y enfermedades; pero olvídense de creer que es suficiente para proporcionarles más años de vida. Por el contrario, una vida miserable, cargada de sufrimiento y dolor mental puede ser fuente de que nuestro Espíritu pudiera concedernos algún tiempo más de vida con la esperanza de que podamos purgar nuestros errores, antes de poder elevarnos a otros planos de existencia en el mejor de los casos, o de prescindir, por completo, de su Personalidad en el peor de ellos.
Nadie al que se le hayan concedido más días de su vida es porque haya sido una bellísima persona. Nuestro Espíritu nos manda aquí a realizar unos determinados trabajos y a pulir nuestros defectos. Cuando nuestro Destino se ha cumplido se nos recompensa con la muerte y el regreso a nuestro Hogar celeste. Si por el contrario, somos duros de cerviz, cabezones y necios, es probable que el Espíritu, solo si él lo cree oportuno, nos proporcionará alguna oportunidad para poder enmendarnos. El tiempo extra de vida en éste Mundo no es una gratificación sino un castigo condicionado con la oportunidad de poder enmendarnos. Pasado el tiempo concedido y de no haber existido enmienda, la personalidad será definitivamente eliminada, con el Cuerpo, por su propio Espíritu.
Y recuerden, ningún suicidio o asesinato son por voluntad del Espíritu sino de la Personalidad. Y en ambos casos, siempre, contraviniendo la voluntad del Ser Espiritual.
Aralba Pensator Minister, Frater R+C