Empezar de Cero
"Tu Segunda Oportunidad"
No sé si has llegado hasta aquí
por casualidad o porque te encuentras mal, realmente mal, casi desesperado;
pero no te preocupes porque así me encontraba yo hasta hace bien poco y encontré la
salida. Si la encontré yo ¿por qué no la vas a encontrar tú también?
Te cansas al salir a pasear. Te
sofocas cuando corres tras un autobús que se te escapa. Notas tus tobillos
hinchados y te pican las pantorrillas. En cuanto tomas una posición pasiva se
te duermen tanto las piernas como los brazos y tienes arañas vasculares que
terminan convirtiéndose en varices.
Quizá estés convencido que esto
te sucede porque has pasado de los cuarenta, fumas en forma habitual y tomas
alcohol de forma ocasional.
Todo lo anterior influye; pero
hay algo mucho más importante y en lo que probablemente no hayas caído. No te
mueves, estás pasivo, respiras mal y tu sangre no circula con facilidad. Pasas
demasiado tiempo frente al ordenador, en el trabajo, y ante el televisor viendo
tus series favoritas.
El Cuerpo Humano está diseñado
para estar en movimiento, no eres un roble o un sauce llorón. Tu metabolismo
animal y de mamífero no tiene nada que ver con las células vegetales; las tuyas
requieren respirar y alimentarse de forma más veloz. Tu sangre distribuye el
oxígeno y el alimento de tus células, además de las defensas adecuadas para
contrarrestar cualquier ataque externo a tu organismo.
Quiero que mientras lees esto,
visualices todo lo que te cuento. Si no te mueves, si no haces un ejercicio
adecuado a tu edad, constitución y necesidades, tu sangre no circulará de forma
adecuada y como consecuencia las células de todo tu cuerpo, unas antes otras
después, irán degenerando de forma progresiva hasta que sientas que ya no hay
vuelta atrás y sintiendo, como algo inevitable, un extraordinario deterioro de
tu calidad de vida, repleto de achaques y enfermedades que intentarás
contrarrestar con medicamentos que te aliviarán los síntomas y producirá efectos secundarios; pero que jamás te
curarán porque el problema es que tu Cuerpo se ha vuelto vago y ya no tiene
ganas de luchar más. La Medicina se encuentra en tí mismo.
Tienes, no obstante, una segunda
oportunidad gracias a algo que conocemos como Voluntad; dite, comenzaré desde
cero. No, no sirve de nada que me levante e intente realizar, en una hora, todo el ejercicio
que no he realizado en el resto de mi vida. Eso no funciona así, e incluso
sería contraproducente dañando más aún a mi organismo. Me levantaré y andaré
diez minutos hoy, veinte mañana y así hasta andar, trotar e incluso correr hasta una
hora; pero sin prisa. Si me pongo a correr, así de primeras, lo que me puede
suceder es que me dé un infarto, porque mi cuerpo perdió la costumbre de ejercitarse, si es que
alguna vez la tuvo de pequeño.
Debo alimentarme mejor huyendo de
todo aquello que, aunque tenga buen sabor, su poder nutritivo sea nulo. Tomaré el
número de calorías diarias necesarias a mi constitución y peso, dividiéndolas
en el porcentaje de hidratos de carbono y proteínas de calidad que más beneficien, en mi
situación actual. Según pase el tiempo y vaya mejorando mi sobrepeso deberé ir
ajustando dichos porcentajes nutritivos. No debo olvidar tomar las frutas y verduras que
me proporcionen las necesarias vitaminas y minerales necesarios para los
procesos internos de las células de mi cuerpo.
Pero, te dices ¿sabré hacerlo?,
¿no me perjudicaré si me equivoco en algo? "Está muy lejos de mis posibilidades,
mejor lo dejo y que sea lo que Dios quiera" En esa estamos.
Te falló la fuerza de voluntad a
pesar de que intentaste dar el primer impulso; pero por favor no te desanimes,
si necesitas ayuda solicítala. Deja que las personas apropiadas puedan ayudarte
a salir del pozo, poco a poco y sin prisas. Te recomendarán que comiences con
ejercicios anaeróbicos que no vuelvan loco a tu ritmo cardíaco; después
experimentaremos con el ejercicio aeróbico para ir aumentando tu capacidad
pulmonar y que el oxígeno de tu respiración, mediante los alveolos pulmonares,
penetre en el torrente sanguíneo y acuda raudo en auxilio de los rincones más
desasistidos de nuestro cuerpo.
El aire impulsará el torrente
sanguíneo y ese torrente líquido dilatará tus arterias y venas produciendo
nuevos vasos capilares para poder llegar hasta la última célula. El organismo
comenzará a regenerarse, comenzará a respirar y empezarás a sentirte mejor al
principio y bien del todo cuando hayas progresado en tu segunda oportunidad. Se irán disolviendo los cúmulos de ácido úrico y otras toxinas
No tengas miedo al ejercicio
realizado con moderación y de forma proporcional a tu actual situación y, si tu
fuerza de voluntad decae pide ayuda a algún profesional que pueda asesorarte y
dirigir tu progreso paso a paso; pero recuerda, tu situación actual ha sido el
producto de muchos años de indolencia y despreocupación por tu físico. No te
vas a convertir en un atleta de la noche a la mañana; pero te aseguro que si te
lo propones como meta, hasta eso y más podrás conseguir.
No mejorará solo tu estado físico
sino también tu estado anímico, mejorando tu capacidad intelectual y emocional.
Tu calidad de vida cambiará como de la noche al día y podrás disfrutar de la
Vida como nunca lo podrías hacer estando sumido en un sofá visualizando cualquier
serie televisiva. No tengo nada en contra de ello, puedes seguir viendo tus
series favoritas; pero organiza tu vida y contrólala. Todo con moderación; pero
sin olvidar que nuestros cuerpos son máquinas biológicas que necesitan del
movimiento para estar debidamente lubricadas.
Desde aquí te ofrezco todo mi
apoyo, si es lo que necesitas y espero que tras ésta, tu lectura, te ofrezcas a
ti mismo una segunda oportunidad y no pasa nada si tienes que empezar de cero.
Sí que sucedería si te mantuvieras inerte y pasivo como al presente
dejando que todo en tí empeore. No hay milagro en todo ello sino simple sentido
común.
Levántate y anda. Un pasito
primero, después un segundo y tercero. Cuando menos te lo esperes estarás
corriendo en el parque más cercano o apuntándote a una media maratón. Tu grasa
dará paso a la materia magra que conocemos como musculatura, la flacidez dará
lugar a la tonicidad y la desgana sexual se transformará en un aumento de la
lívido gracias al aumento de testosterona en tu cuerpo.
Recuerda, no estás solo, si lo
deseas estaremos contigo
.
ARALBA