"La Respiración"
El entrenamiento respiratorio es necesario realizarlo en circunstancias específicas como en el alpinismo, la natación, el submarinismo y con algunas patologías del Sistema Respiratorio; pero salvo en los casos mencionados y, quizá, alguno más, la respiración debe de ser lo más natural posible; es decir se inhala el aire por la nariz y se exhala por la boca, siendo la duración de la expulsión del aire, por lo menos, el doble del utilizado para introducirlo en nuestro Organismo.
En Internet y en el Universo de la New Age se pueden encontrar diferentes variantes de ejercicios respiratorios y que conforman un conjunto denominado como "Respiración Consciente". Cómo vamos a ver, lo de la respiración consciente es una contradicción con los postulados que, generalmente, defienden estos grupos de eliminar el ego.
Lo que conocemos como Consciencia es una característica de la Personalidad y, por lo tanto del Ego. La Respiración es un procedimiento automático de nuestro Organismo que, salvo por ciertas patologías o vicios adquiridos, funciona a la perfección.
En demasiadas ocasiones, a los deportistas y a quienes acuden a los gimnasios, los monitores muestran a sus clientes determinados métodos respiratorios tendentes a optimizar los resultados de los ejercicios físicos realizados; pero eso es un error que termina afectando a nuestro Cuerpo Vital, substituyendo una forma sana y natural de respiración por otra peligrosa y antinatural.
Todos aquellos ejercicios respiratorios que provoquen algún tipo de apnea; es decir, retención del aire durante unos segundos son inadecuados y contraproducentes, tanto para el Sistema Respiratorio como para el Cardíaco, a medio y largo plazo.
Todos hemos nacido sabiendo respirar y lo mejor, en la mayoría de los casos, es dejar que nuestro Organismo lleve la iniciativa en ese asunto y no dejar que sea la mente quien rija unos movimientos que son de origen involuntarios, como los latidos del corazón. Hacer la respiración consciente puede convertirse en un vicio que puede terminar provocando complicaciones respiratorias debido a la ansiedad por intentar mantener un tipo determinado de respiración.
Ese afán por controlarlo todo, que tiene la mente, nos puede conducir a situaciones de hiperventilación o, por el contrario, de acumulación de dióxido de carbono, que afecta a la circulación del oxígeno en sangre y por lo tanto, a la inadecuada oxigenación de todos los órganos, incluído el cerebro.
Si tras haber leído los párrafos anteriores creemos padecer algunos de los vicios respiratorios mencionados, a continuación damos unos breves ejercicios respiratorios para reacondicionar a nuestro Cuerpo Vital y equilibrar el proceso natural y automático de nuestro Organismo en materia de respiración.
En primer lugar, es importante la adecuada hidratación de nuestro Organismo, entre un litro y medio y dos litros de agua diarios, con el fin de mantener fluidas las mucosas, incluidas las de las fosas nasales y que, en muchos casos, son las causantes de una inadecuada inhalación por la boca, en lugar de por la nariz.
También es importante conocer si nuestras fosas nasales funcionan de forma equilibrada. Para ello, taponamos una de las fosas y respiramos por la que queda libre, repitiendo el proceso con la otra, siempre expulsando el aire por la boca hasta quedarnos exhaustos, antes de realizar una segunda inspiración y siempre intercambiando el taponamiento de los orificios nasales.
Una vez comprobado que no debemos de acudir al otorrinonaringólogo para que nos despeje, la mucosa reseca retenida, en las fosas nasales, realizaremos los dos siguientes ejercicios respiratorios y que están avalados por la Comunidad Sanitaria:
Ejercicio de Respiración labial fruncida:
"Siéntese en una silla con la espalda recta. Relaje los músculos del cuello y los hombros, inhale calmadamente y sin esforzarse, durante dos segundos, por la nariz manteniendo, en el proceso, la boca cerrada; frunza los labios, como silbando, y exhale lentamente por cuatro segundos; repita los pasos anteriores las veces que sea necesario por unos cinco minutos."
Ejercicio de Respiración diafragmática:
"Se realiza estando acostado o sentado, con la espalda recta, en una silla; se colocan las dos manos boca abajo sobre el abdomen, sintiendo el ascenso y el descenso en cada respiración; cierre la boca y respire, de forma pausada, por la nariz en tanto que se siente que el abdomen se eleva; exhale lentamente, el aire, a través de los labios fruncidos. Cada espiración, debe de tardar entre dos y tres veces más que cada inspiración. Repita estos pasos entre y diez minutos manteniendo, siempre, las manos en el abdomen."
Estos ejercicios los realizaremos solo si hemos comprobado que no estamos respirando de la forma adecuada por cualquier motivo.
De verdad, no hay que obsesionarse con la respiración. Nuestro Cuerpo Vital, de forma instintiva, sabe cómo debemos de respirar, pues incluso cuando tenemos pequeños problemas respiratorios, debido a un simple catarro, el provocar la respiración consciente puede llevarnos a resultados contrarios al perseguido.
Nos consta, ya sé, que muchos de nuestros amigos, estudiantes rosacruces, de algunas instituciones, han recibido instrucción contraria a lo aquí expuesto. Los sonidos vocales, también llamados mantras, impiden que la respiración se produzca de forma natural y podemos terminar generando un problema respiratorio. Otro tanto sucede cuando se habla de respiración positiva y negativa de cara a determinados métodos de curación por imposición de manos.
Max Heindel decía que todas esas técnicas, procedentes de Oriente, pueden ser útiles y adecuadas para gentes de dicha procedencia y que llevan siglos o miles de años practicando dichas experiencias y sus cuerpos vitales están adecuados a ellas; pero aquí en Occidente, pueden conseguirse resultados opuestos a los perseguidos, dado que nuestro Cuerpo Vital, no es que sea mejor ni peor que el de hindúes y budistas, está entrenado, desde tiempo inmemorial, de una forma, simplemente, distinta.
Nuestro Consejo es que si no tienes problema alguno, sigue con tus prácticas de "Respiración Consciente"; pero a poco que sientas algo raro, para y abandona esas prácticas y reacondiciona tu Cuerpo Vital, respecto a la Respiración, con los ejercicios que aquí te proponemos.
Y recuerda, desde el mismo momento de nacer ya sabías respirar. Que no te cuenten cuentos.
Aralba Pensator Minister, Frater R+C