"El Miedo mata"
-¿De qué modo, el Temor, destruye el Sistema Inmunológico?-
Llevamos algo más de dos años, no sabemos si de forma planificada o no, creemos que sí, sometidos a una presión mediática persistente que, más que informar, pretende cargarnos de temor, miedo e incluso pánico. Un miedo que provoca stress en nuestro Organismo. Un estrés que impide un funcionamiento equilibrado de nuestro Sistema Inmunológico, provocando que a medio y largo plazo se incuben enfermedades de diversa gravedad.
"El estrés psicosocial tiene un profundo impacto en el bienestar y la salud. La respuesta al estrés está asociada principalmente con la amígdala, una estructura crucial del sistema de defensa del miedo, esencial para la cognición social y la regulación de las emociones. Recientes estudios de neuroimagen demostraron cómo un aumento de la actividad metabólica de la amígdala aumenta la inflamación y conduce a la enfermedad cardiometabólica."
(https://www.intramed.net/96439)
El estrés no es malo en sí y siempre que no se mantenga activado durante un tiempo prolongado. El Miedo circunstancial con su estrés asociado pueden salvarnos la vida cuando nos encontramos ante situaciones donde puede peligrar nuestra integridad física. Así, el estrés, con una dosis adicional de adrenalina puede hacer que salgamos con buen pie ante algún accidente o frente a un peligroso depredador; ahora bien, si el miedo y el estrés se acumulan, por no cumplir con su obligado cometido, el cortisol y otras peligrosas toxinas impiden un riego sanguíneo adecuado y que los leucocitos y otras células guardianas puedan llegar, allí donde fuese necesario, con la calidad y celeridad requeridas.
"La bajada generalizada de las defensas conlleva que virus, bacterias y gérmenes se encuentren menos resistencia. No obstante, no se observa solo una mayor predisposición a infecciones agudas por agentes patógenos externos, sino también a aparición de brotes en enfermedades crónicas (neurodermatitis, artritis reumatoide, colitis ulcerosa…), resurgir de síntomas típicos de virus latentes (las ampollas labiales del herpes) y empeoramiento de las alergias. Además, el proceso de curación también puede verse prolongado por el estrés crónico (las heridas, por ejemplo, se curan más lentamente)."
Digamos que nuestro Organismo Fisiológico-Emocional se encuentra en un perfecto; pero frágil equilibrio entre las necesidades neurológicas y las puramente fisiológicas. Mientras ese equilibrio se mantenga, aunque fuese de un modo imperfecto, la salud no corre gran peligro; pero si ese Sistema de precisión se desequilibra, se deteriora, aparecerá la enfermedad a causa de una deficiencia inducida en nuestro Sistema Inmunitario.
Por un lado tenemos un Sistema automático que defiende al Organismo y que, siendo puramente fisiológico, no puede conocer el miedo o provocar estrés emocional alguno. Ese Sistema que comparte el sistema linfático y el neurovegetativo es el responsable del correcto funcionamiento de nuestro Sistema Inmunológico.
Pero ¿Que sucede cuando los recursos energéticos son reclamados por el estrés emocional y más cuando se produce en un espacio de tiempo más o menos prolongado?, Si ese tiempo, como hemos visto, es corto no hay mayor problema que algún susto y pequeños efectos negativos en nuestro Organismo, sin llegar a un nivel patológico. No sé, escalofríos, los pelos de punta, enrojecimiento de la piel, pérdida de color cutáneo, etc, etc…, esto se debe a que los recursos se la sangre y nerviosos son requeridos, de forma temporal, para salir del aprieto; es decir, del peligro. Pasado el susto, todo vuelve a la normalidad y el equilibrio, entre lo mental-emocional y lo fisiológico se reequilibra.
Ahora bien, si no se trata de un simple susto, sino que, emocionalmente, el miedo se mantiene en el tiempo, esos recursos energéticos quedan, por decir así, secuestrados por nuestra mente impidiendo, así, que puedan cumplir con sus funciones fisiológicas, entre las que se encuentra la defensa de nuestro Organismo contra patógenos internos y externos.
Si se desea conocer, con profundidad, como actúa este componente psicológico sobre el correcto funcionamiento del Organismo, se puede indagar en la Red para comprobar, por ustedes mismos y con un lenguaje más técnico cómo influye el miedo de la Mente en el deficiente funcionamiento del Sistema Inmunitario.
En ese sentido, de producirse el Problema, también se da una suerte de enfrentamiento entre el Sistema neurovegetativo, de funcionamiento automático, con el Sistema neuronal cerebral consciente y que por un sentimiento de miedo acapara para sí los beneficios que deberían de estar repartidos, de forma equilibrada, entre lo consciente y lo inconsciente.
Es así que la Meditación regular es algo necesario, si no imprescindible, para que nuestro Sistema Fisiológico-Emocional se reequilibre después de algún tipo de Trauma psicológico, como pueda ser la pérdida de alguien querido o de alguna valiosa posesión.
Que el Conocimiento de cómo funcionan los complejos sistemas de nuestro Organismo, se utilice para manipular a los humanos, tanto de forma individual como colectiva, debería de ser considerado como un Delito de Lesa Humanidad, pues meter el miedo en el Cuerpo, debido a rumores de guerra o a la posibilidad de morir por cualquier tipo de enfermedad epidémica, puede resultar patológico y mortal.
La Muerte de un Ser querido o la perdida de nuestra vivienda, por ejemplo, requiere de un duelo que puede extenderse de unos pocos meses a, como mucho, uno o dos años; pero cuando, de forma artificial, por cuestiones geoestratégicas, sociales o políticas, el Problema se mantiene durante años, puede resultar mortal para el equilibrio de nuestro Sistema Inmunitario y, por lo tanto, a medio plazo, para mantener la Vida.
El Miedo Mata.
No dejen que el Miedo penetre en sus almas e impidan que alguien se lo intente inducir.
Vivan el día a día y no tengan miedo a morir. La muerte es una parte natural de la propia vida y todos tenemos que aceptar que algún día deberemos de morir. Aferrarse a la Vida por miedo a morir no es una buena idea. El vivir el momento sí que lo es.
Utilicen la Meditación diaria para vaciar sus mentes de cualquier miedo y Temor. No dejen que se acumulen estás peligrosas emociones y que requieran los recursos de su Sistema Inmunológico. Éste Sistema, como el resto de su Organismo, posee su propia Inteligencia. No es una Inteligencia Consciente, tal y como se entiende; pero si, por miedo, impedimos que realice su trabajo programado, no moriremos por un accidente, un homicidio o un contagio externo, sino porque nuestro Sistema Inmunitario no poseerá las armas para luchar contra la permanentete guerra que mantiene, desde que nacemos, contra los patógenos tanto externos como internos.
Aralba R+C