"Aceites aromáticos e inciensos"
-¿Son útiles?, ¡Verdad y Mito!-
Los grupos animistas, incluso los rosicrucianos, suelen dar bastante importancia a los ambientes olorosos; dado que provocan cierta espirituosidad similar a la provocada por los licores espirituosos.
En el Tema de los ambientadores espirituales, los grupos rosicrucianos son muy discrepantes en sus posturas. Unos grupos usan los inciensos y aceites como parte integral de sus rituales. Otros, por el contrario, los evitan a toda costa pues entienden que provocan un ambiente propicio a la proliferación de los malos espíritus.
Después de más de cuarenta años visitando los diferentes templos, escuelas y logias, por experiencia, creo que podemos decir algo apartado del animismo espiritualista y de la ignorante superstición.
Como todos ya debéis de conocer, nuestro primer contacto con el Mundo Rosicruciano fue mediante la Rosicrucian Fellowship, conocida en los países hispanos como "Fraternidad Rosacruz". En el Trabajo de Carl Louis Fredrik Grasshoff, Max Heindel, el uso de los inciensos no sale bien parado porque, decía, era la puerta de entrada de ciertos espíritus elementales, como poco, perjudiciales para el progreso espiritual humano.
Mi experiencia personal, tanto en los templos de la Fraternidad Rosacruz como en los de la Rosacruz Aurea, su natural sucesora, fue de un total bienestar físico que propiciaba la relajación, tan importante para entrar en un estado profundo de meditación. Esto, ahora lo sé, era debido a dos condiciones, la primera, mi condición física deficiente y la segunda, la perfecta ventilación de las estancias así como la falta de elementos ambientales extraños que no fueran los propios de una limpieza e higienización adecuadas.
Cuando regresamos de la Ciudad de León, España, teniendo unos treinta años de edad, tuvimos nuestro primer contacto con los templos de la AMORC, concretamente cuando éste se encontraba en la Calle de Hernani en Madrid. El ambiente del Templo, dado que se encontraba en un antiguo garaje, era cerrado y cargado con los aromas del incienso de rosas que la Orden suele utilizar.
Conocemos que el uso de los inciensos, así como la combustión de la cera de las velas procede de la Tradición Religiosa, especialmente de la Oriental, procedente de la India.
Os voy a hablar con total y absoluta sinceridad, como siempre lo hacemos. A pesar del buen ambiente y de lo perfumado de la Estancia, yo me sentía morir. A continuación os explicaré la verdadera causa y que no tiene demasiado que ver, ni con el animismo supersticioso ni con la proliferación de elementales etéreos.
En AMORC, he tenido grandes experiencias y conocí a muy importantes fratres y sorores que terminaron convirtiéndose en referentes para mí; pero cuando entraba en sus templos me sentía morir. Sentía mi pecho, como si fuera a salírsenos el corazón, me faltaba el aire y me daba la impresión de que si no acababa eso pronto, podría morirme allí mismo, y constituir un problema para los asistentes. Esta es la primera vez que expongo esta repetida experiencia en público y no, no era porque la estancia estuviese repleta de elementales y demonios.
Antes de regresar a Madrid, jamás había sentido esa sensación de cercanía de la Muerte y nada tiene que ver con la AMORC, dado que también lo noto, ahora, cuando trabajo con corrientes eléctricas de cierta intensidad. Cosa que, a pesar de haber sido electricista, en el pasado, jamás nos había sucedido con anterioridad.
El problema no era el ambiente sino una deficiencia cardíaca congénita que siempre nos ha acompañado y que solo hace unos pocos meses me fuera diagnosticada. En la actualidad conocemos que padecemos una isquemia cardíaca crónica y que nos ha hecho tener una angina de pecho, enfermedad coronaria, que en varias ocasiones nos ha tenido al borde del infarto de miocardio. Bien, ese era todo el chiste.
En cierto sentido, Max Heindel, tenía algo de razón cuando decía que el uso de inciensos, así como los mantras no estaban diseñados para todos. Él decía que era propio y beneficioso para los orientales; pero perjudicial para los occidentales y, hoy, estoy seguro de que hablaba por experiencia propia, como hoy os hablo yo a vosotros.
Tanto la Fraternidad Rosacruz como la AMORC, poseen un origen teosófico, dado que ambos fundadores, Heindel y Lewis, formaron parte de la Sociedad Teosófica en Estados Unidos. Por lo tanto, ambos habían tenido experiencia con ambientes cargados de incienso. ¿Por qué Lewis propició el uso del Incienso y Heindel, sin embargo, lo evitaría como alma que lleva el diablo?
Resuelto el Misterio:
El Danés, nacionalizado Estadounidense, Max Heindel, padecía una deficiencia cardíaca que, a pesar de sus esfuerzos médicos naturales, lo conduciría tempranamente a la muerte con tan solo 53 años de edad.
El Sistema Cardio-respiratorio hasta hace pocas décadas era una especialidad conjunta que ahora se ha dividido en dos, Cardiología y Neumología. Del mismo modo que los sistemas circulatorio y urinario forman una suerte de vasos comunicantes, en donde la falta de evacuación de orina puede provocar la elevación de la presión sanguínea, así los sistemas circulatorio, con el corazón como protagonista, y el neumológico, con los pulmones, están íntimamente conectados. La deficiencia respiratoria se compensa con un buen Sistema Cardiovascular y un deficiente Sistema Cardiovascular se compensa con un eficiente Sistema Respiratorio.
Pero, ¿Qué sucede cuando, estando deficiente uno de ellos, deficitamos el trabajo del otro?
Desde muy chico, es nuestra experiencia, siempre tuvimos diagnosticado un problema respiratorio crónico y, ahora también sabemos, un problema cardiovascular no diagnosticado en su día.
Estar en ambientes enrarecidos y cerrados, con poco oxígeno en el aire, no parecería lo más apropiado para personas que soportamos estas carencias fisiológicas.
Por lo tanto, si eres una Persona sana, tanto a nivel respiratorio como cardiovascular, los ambientes enrarecidos con productos ambientadores y la vocalización de mantras que provocan cierta apnea respiratoria, pueden ser para tí; de lo contrario, nuestro consejo es que evites esos lugares y, por lo tanto, las organizaciones que propician, en sus templos y logias, dichos ambientes y prácticas insanas para el Corazón.
¿Cual es la posible ventaja mística de un ambiente cargado, con prácticas de apnea respiratoria, y con poco oxígeno?
La falta de oxígeno en los pulmones hace que la carga de oxígeno, en el cerebro, sea deficiente y que las conexiones neuronales se relajen de un modo similar al que se produciría al consumir ciertas drogas psicodélicas como el LSD, u otras drogas como la Ayaguasca o el Peyote.
Por lo tanto, nuestro consejo es que comprobéis como os sentís en uno u otro ambiente; es decir, uno despejado y oxigenado, donde os podréis relajar adecuadamente sin sentiros morir, u otro cargado de humo de incienso que os proporcionará mejores alucinaciones; pero que os hará sentir al borde del desmayo.
Ahora vosotros elegís.
Aralba Pensator Minister, Frater R+C