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jueves, 12 de mayo de 2022

63 Lección, Sexto Grado, Segunda Orden

 "La Fibromialgia y el Alma"


Un médico de cabecera o un especialista en traumatología, por sí mismos, jamás podrán ayudar a curar la Fibromialgia. No se nos mal entienda, dado que nos referimos solo a aquellos profesionales que no se encuentran capacitados para tratar los problemas del Alma. 


El Espíritu y el Organismo de nuestro Cuerpo están unidos mediante el Alma. La Fibromialgia es una forma de no aceptación del Cuerpo por parte del Espíritu; dicho de otro modo, que existe una soldadura falsa entre el Cuerpo y el Espíritu, luego lo que procede es reforzar la soldadura; es decir, el Alma.


El problema, en el tratamiento de la Fibromialgia, es la ignorancia gnóstica de parte de los terapeutas, sean médicos, psiquiatras o psicólogos ¿como pueden curar algo en lo que no creen? El Alma. Los problemas del Alma no se pueden corregir mediante fármacos; de hecho, ese intento improcedente de corrección lo que hace es profundizar en el problema de división entre el Cuerpo y el Espíritu.  


Por otro lado, los sacerdotes no se encuentran en mejor situación pues hace siglos que cambiaron el Conocimiento por la Superstición. Mi consejo es la Meditación y, dentro de ella, escuchar lo que nos trata de decir el Espíritu mediante la Intuición, escucharlo y fortalecer nuestra Alma. 


Cada día, el Cosmos vibra más rápido y los humanos somos más hipersensibles. Si reconocemos la Causa podremos tranquilizarnos sin necesidad de buscar otras causas físicas. Nuestro mejor médico, a nivel espiritual, somos nosotros mismos. Ejercicios Físico y de Meditación, esa es la receta infalible.


En los últimos tiempos vienen proliferando los centros de Fitness mediante electro estimulación. Cuidado, vuestros órganos internos podrían peligrar. Se trata de frecuencias electromagnéticas de baja frecuencia que pueden interferir con la propia frecuencia de vibración de los órganos.


En la soldadura por fricción de dos metales, la unión metálica se realiza mediante una altísima temperatura, lo que hace que se fundan sendas partes y conforme una poderosa unión al enfriarse. Así es el Alma respecto al Espíritu y el Cuerpo.


El Alma es, comparativamente hablando, lo mismo: La porción formada por la juntura entre el Espíritu y la materia física. Por lo tanto, toda Alma está compuesta de una parte, heredada del Espíritu, eterna e inmortal, y otra perecedera y reciclable proveniente de lo físico.


Cuando el Cuerpo enferma, enferma la parte física del alma lo que, por inducción, afecta al Alma inmortal. Debido a la unión intrínseca entre el Cuerpo y el Alma, es que toda curación debe tener en cuenta, de forma principal, al Alma.


Mediante la introspección y la visualización que se realizan con la Meditación, penetramos en la sala de control del Alma y desde ahí mandamos las órdenes curativas de forma holística e integral a los órganos y a sus conexiones neuronales que los unen al Alma.


Aralba R+C



62 Lección, Sexto Grado, Segunda Orden

 "Cuando el bien de una minoría debería de estar supeditado al bien de la mayoría"


Lo que parece bueno, en el corto plazo, para los individuos podría resultar desastroso, en el largo plazo, para la Especie.


Aumentar la protección temporal del Individuo, mediante las vacunas, podría resultar en una disminución drástica de las defensas naturales en la Especie y su deriva hacia la extinción.


Es en el segundo film de Star Trek, "La Irá de Khan", donde el Sr Spock pone de manifiesto la premisa de que el bien de uno solo está supeditado al bien de la mayoría, sacrificando su vida para salvar a la tripulación de la Enterprise. Pero, al parecer, la Humanidad, a día de hoy, no termina de comprenderlo.


El Miedo a morir produce un egoísmo intrínseco que prima el individualismo egoico del individuo sobre el sentimiento comunitario del Colectivo Humano. 


Nosotros, en tanto que individuos de una Especie, somos meras células de un cuerpo mucho mayor, como lo es una hormiga o una abeja respecto de sus hormiguero o colmena. Si mueren una, diez o cien hormigas o abejas, el hormiguero y la colmena pueden seguir adelante; pero si estos desaparecen, ya no habrá más hormigas o abejas.


Con el fin de preservar la vida del individuo de la Especie Humana se ha desarrollado una importante investigación médica que incluye la practica de inmunizaciones masivas mediante las vacunas y eso está bien; pero también trae consigo un efecto secundario importante que es fácil de entender incluso para un profano en ésta Materia.


Cuando, desde fuera, mediante inoculaciones, estamos inmunizando a un Organismo, su natural Sistema Inmunitario se relaja y esto ¿Que quiere decir? Que se vuelve, cada vez, menos efectivo pudiendo llegar a anularse por completo y dejando las defensas propias tan bajas que se dependería, al ciento por cien, de los planes de vacunación estatales; llegando hasta el punto de que, estaríamos protegidos, mediante las inoculaciones, contra virus extremadamente peligrosos pero inermes ante la proliferación de otros virus que se tuviesen por menos nocivos para la vida humana. 


Esa inmunización colectiva es la que proporciona la Naturaleza con el fin de proteger a las especies y a la que la Medicina denomina como "Inmunización de Rebaño"; es decir, muchos se infectan y unos pocos fallecen; pero, con el transcurrir del tiempo y de la enfermedad, el grupo queda inmunizado y protegido contra la enfermedad.


Pero claro, eso solo puede suceder si el Sistema Inmunitario de los individuos es fuerte y no ha sido, sistemáticamente, modificado mediante los planes periódicos de vacunación. Nadie está en contra de las vacunas. Éstas han salvado infinidad de vidas, de enfermedades tan graves como la Polio o la Viruela entre muchas otras; pero entendemos que, en casos concretos, como puede ser la Influenza o Gripe estacional, que nuestros organismos están, salvo casos excepcionales y muy concretos, preparados para defenderse de sus patológicas consecuencias.


No nos engañemos, los programas de vacunación de la Gripe están pensados para disminuir las bajas laborales de los trabajos y así aumentar la productividad empresarial; es decir, la capacidad de generar dinero para los empresarios, los estados y los organismos financieros. Una oleada de Gripe puede suponer muchos días de baja laboral y pérdidas económicas. En éste sentido, los seres humanos somos vistos como meras herramientas para cumplir una función meramente economicista. Se nos ha convertido en un "Homo Economicus", deshumanizándonos del todo y transformándonos en un mero aparellaje al mismo nivel que una garlopa o unos alicates.


Es un error considerar que mientras más vacunas tengamos en nuestro cuerpo más inmunizados estaremos, en tanto que el propio Sistema Inmune interno, por una Ley Natural, al ser sustituido por medicamentos externos, se relaja e inhibe hasta el punto de llegar a convertirse en algo inútil cuando, en verdad, se requiriere su plena funcionalidad.


Así, por intentar proteger, de una forma egoísta, capitalista diría yo, la integridad laboral del Individuo, estamos transformando a nuestra Especie en débil y sujeta a terribles infecciones por enfermedades, que de otro modo, podrían haber resultado insignificantes.


Todo ello es el resultado de una descreencia generalizada que ha instalado el miedo a enfermar y morir en la mente de los individuos de nuestra Especie; sin entender, que, a parte de ser extraordinariamente valiosos como individuos, no dejamos de ser otra cosa que partes o células de un Ser mucho más grande e importante, que es el Colectivo Humano. El Individuo siempre debería de estar dispuesto a sacrificarse por el Colectivo; pero claro, al eliminar del Individuo un Sistema de creencias y Moral determinado, (Familia, Patria, Dios, Vida después de la muerte…) que favorezca esa actitud, es como si hubiésemos destruido la argamasa que une los ladrillos del Colectivo. Así un Edificio no puede mantenerse en pie y una Especie Animal, como la nuestra, la Humana, tampoco.


Está claro que si esta locura de contínuas inoculaciones se extiende en el Tiempo, de forma sistemática, lo único que se conseguirá, en el futuro, es una Humanidad más débil y con más posibilidades de extinguirse como Especie.


No estamos en contra de las vacunas, que se entienda bien, sino de un uso abusivo de las posibilidades que nos proporciona la Medicina actual.


Es una falacia arrogante considerar, seriamente, que la Ciencia, fruto de la Personalidad humana, puede mejora la Evolución Natural fruto de la planificación del Espíritu Divino


Aralba R+C 


sábado, 7 de mayo de 2022

61 Lección, Sexto Grado, Segunda Orden

 "Medicina y Rosacruz, un vínculo inquebrantable"


-El verdadero ser de la Rosacruz-


Aunque la Rosacruz nace en Tubinga, Alemania, en el Siglo XVII, su inspiración se remonta al Siglo XVI, en la Figura del Personaje real Teofrasto Paracelso y su reconocida actividad como Médico y Químico. Su origen literario surgiría con el ficticio nacimiento en 1378 (Siglo XIV), del legendario Christian Rosenkreutz, cuya Vida y Obra está registrada en la Fama Fraternitatis.


"Paracelso fue un médico nacido en las afueras de Zúrich, en 1493, Suiza y fallecido en Salzburgo, Austria en 1541. Como era común en aquella época, practicaba la alquimia y la astrología, siendo su principal aporte a la medicina moderna la creación de las primeras drogas basadas en químicos y minerales; luego podría decirse que fue el Padre de la Farmacología actual"


Por lo tanto, dado que según se registra en los manifiestos reconocidos, universalmente, de los rosacruces que Paracelso es el gran inspirador de tan Augusta Fraternidad, podemos afirmar sin equivocarnos que la relación de la Rosacruz con la Medicina, desde sus orígenes, es algo que se encuentra fuera de toda duda. Posteriormente, no obstante, ya en el Siglo XVII esa relación se extendería a la didáctica o pedagogía mediante Jhon Amos Comenius (1592-1670) Moravia, actual Chequia, que fuera discípulo del Pastor Luterano Johannes Valentinus Andreae (1586-1654) Alemania, el ideólogo principal de nuestra muy afamada Fraternidad.


Existe, de forma generalizada, la falsa creencia de que la Rosacruz es una suerte de Universidad para la Medicina Complementaria; es decir para la Naturopatía y la Fitoterapia, el Reiki, la Quiropraxia y Osteopatía o la Gemoterapia y la Cromoterapia entre muchas otras, incluyendo la propia Astrología, la Kinesiología y la Iridologia como medios de diagnosticar las diferentes dolencias.


Esa Idea, como decimos muy extendida, se debe a que un gran número de los estudiantes de las diversas escuelas rosicrucianas, al no poseer título Académico de Medicina, consideran que dedicarse a esas técnicas terapéuticas complementarias, les acerca más al ideal de los Hermanos Rosacruces; pero como estamos viendo, la realidad es bastante diferente, en tanto que Paracelso fue uno de los padres de la Medicina Tradicional, independientemente de que en aquella lejana época todavía no existía una diferencia clara entre la medicina clásica o natural y la química que éste Médico suizo inaugurara y que ha llegado hasta hoy.


Es un error frecuente creer que se puede ser un Hermano de la Rosacruz por el mero hecho de practicar algún tipo de actividad sanitaria; en tanto que, lo que queda muy bien reflejado en los manifiestos de los ideólogos rosacruces, es que los Hermanos de la Rosacruz deben de dedicarse, en exclusiva, a la curación de los enfermos; pero, ojo con ésto, sin cobrar por ello y, entonces, ¿Como se come tal cosa?


Según parece, eso de dedicarse a ser un Rosacruz es algo no solo muy complejo, dado que se requiere una completa formación en Medicina, sino que también se deben de tener los recursos económicos necesarios como para realizar, tal labor, de forma absolutamente gratuita. 


Eso solo se puede realizar si la Persona, en cuestión, es rentista, pensionista o poseyera algún tipo de forma, más o menos mágica, de sacar dinero del aire u oro del plomo. Efectivamente, dice la Leyenda que los Hermanos de la Rosacruz eran poseedores de un polvo, procedente de la Piedra Filosofal, con la capacidad de transformar, alquímicamente, cualquier metal en puro oro. 


En éste sentido, debemos de considerar y recordar, a todos nuestros lectores, el sentido profundamente alegórico de los tres manifiestos rosacruces.


Es por ello, la importancia que tiene el conocer que todos los amantes de la Rosacruz somos Estudiantes Rosacruces, dejando eso de Hermanos de la Rosacruz, como una utopía solo al alcance de ocho desconocidos hermanos y con la capacidad utópica de cumplir con tan exigentes requisitos. Eso no quiere decir que los hermanos rosacruces tengan que ser, obligatoriamente, titulados universitarios en Medicina colegiada; pero tampoco que, ese requisito de médico, se pueda suplir con una formación paralela en Medicina Natural y complementaria.


Tenemos, en todo instante, que ser consecuentes con nuestras posibilidades y tener presente lo metafórico de la Profesión Médica para los rosacruces, en tanto que lo fundamental no es la sanación del Cuerpo sino del Alma. Médicos de cuerpos y almas; pero fundamentalmente del Alma. La Medicina que puede sanar el Alma es el Conocimiento de la Verdad; o sea, la Gnósis procedente del Pleroma y a la que podemos acceder, en nuestro interior, mediante la Intuición.


Curando el Alma se sanan los cuerpos. La Medicina de la Rosacruz es una medicina que pertenece a otro Plano Existencial. Quizá la juventud desee llegar a la ancianidad saltándose las experiencias previas; pero eso no puede ser. Por ello, quizá, para llegar a ser un verdadero Adepto Hermano de la Rosacruz, se requiera ser viejo de verdad, y una vez cubierto el cupo de obligaciones para con el Mundo Profano, la vida laboral, dedicar su tiempo restante, ya rentista o pensionado, al servicio de la Rosacruz y de sus semejantes.


La Palabra Sanadora, el Conocimiento gnóstico de la Rosacruz, consiste en predicar la Buena Nueva de Christos, la Cristificación y la definitiva transfiguración del Alma mortal en Alma Inmortal y su simultáneo rescate por parte del Espíritu Santo, el Eterno Christos que mora en nuestro más profundo interior; dicho de otro modo, despertar en los semejantes la Fe y la Esperanza de una Vida Eterna en Cristo.


Los rosacruces son médicos de cuerpos y almas; pero nada se consigue intentando curar el Cuerpo si no se afronta la cura del Alma; sin embargo, una vez acometida la sanación del Alma, la del Cuerpo está garantizada si así lo considera el Ser Interno; porque, de lo contrario, nada se podría hacer, en tanto que la enfermedad también es fruto de experiencias programadas previamente por nuestro Ser Interno antes del nacimiento. Experiencias que deben de experimentarse si o si.


Con todo ello, solo queremos indicar que no hay que obsesionarse con que nos tengamos que convertir en médicos titulados, ni tan siquiera en realizar muchos cursos de medicina natural. Lo que debemos de hacer es mantener una cierta espera pasiva para que sea el propio Cristo el que determine por donde deberá de discurrir nuestra Carrera como estudiantes de la Rosacruz.


Si tu destino es estudiar Medicina, lo harás, que no te quepa duda alguna; pero el deseo de estudiar esto, lo otro o aquello nunca procede del Ser Interno, sino del ego, la Personalidad. Por lo tanto, querido Amigo, no te hagas mala sangre ni obsesiones en adquirir unos determinados conocimientos. Si estos tienen que llegar a ti, no te apures, que así será y si no, serán otros los que tendrás que asimilar porque serán aquellos predestinados para ti y para nadie más.


Aralba R+C